1857.-Arriesgar.


En vez de luchar
contra el pensamiento
y contra el ego.

Deberíamos admirarnos
de cómo los dos juntos
pueden crear de la nada,
mundos completos
en los que nacer vivir y morir.

En lugar de lamentarnos
por nuestra suerte
como seres humanos,
deberíamos tomar las riendas.

Y por un lado, reconocer
nuestra naturaleza
y dejar que todo
siga su curso sin más.

Pero por otro, deberíamos
armar el personaje
del pensamiento.

De manera que su vida fuera
una aventura placentera y plena.

En vez de un escapar del miedo,
de la enfermedad,
la miseria y la muerte.

Si le arrebatamos al pensamiento
la espada con la que nos amenaza,
para mantenernos prisioneros
como víctimas.

No hay límite para
lo que podemos crear
con él.

Solo con que nos
desprendamos de
los falsos apegos
y temores que
coartan nuestra libertad.

Si no perdemos jamás de vista
nuestro vacío fundamental.

Y sabemos que toda
esta vida nuestra
termina con la muerte.

Qué nos impide
arriesgar?