Quien acepta alguna enseñanza,
es porque el relato que muestra
es mejor que el que uno trae.
Y ese es el único
sentido de las enseñanzas.
Mejorar las vidas
de quienes no soportan
el vacío que en realidad somos.
Y necesitan llenarlo con algo,
en vez de abandonarse
a la mente original sin más
y dejarse vivir en plenitud
dicha y paz.