1535.- La red.

 
Sea lo que sea
lo que creamos
que hay más allá.
 
El universo, dios,
la vida, la energía
o la mente única.
 
El intelecto extiende
sobre ello una red
que conforma
de acuerdo a
sus contenidos.
 
Y que atrapa
por completo
nuestra atención.
 
Pasando a vivir
sin quererlo
y sin darnos cuenta.
 
Atrapados en esa red 
de interpretaciones
individuales y personales.
 
De aparentes sucesos
únicos, separados
e independientes.
 
Despertar es
darse cuenta
de ello.
 
Y pasar de ser
un espectador
a merced
de los movimientos
de esa red.
 
A acomodarla
con esmero
de manera
que nos deje
ver a su través.