488.- Irse.



Nos parece que lograr
todos nuestros deseos
nos va a proporcionar
la felicidad.

Pero no es así.

Solo conseguimos
quedar atrapados
en las consecuencias
de nuestros propios pensamientos,
sentimientos y acciones.

Cuando ignoramos los deseos,
acaban por irse ellos solos
y en su lugar aparece el gozo.