932.- Parar.




Nada de lo que percibimos
se detiene jamás.

Así que si estamos
esperando algo,
tenemos un deseo,
o un sueño por llegar.

Más vale que lo disfrutemos
en movimiento
mientras llega,
pasa y se va.

Porque nunca vamos
a poder parar esto
para detenernos a disfrutarlo.