742.- La película.



Ves una película que te impresiona
y no puedes dejar de pensar en ella.

No paras de recordar las imágenes,
los diálogos, los personajes y lo que hicieron.

Resientes una y otra vez lo sentido y proyectas
en la trama tus propias opiniones,
pareceres, temores, deseos y expectativas,
como si todo eso fuera real.

Y acabas pretendiendo soltarle tu rollo
a cualquiera que esté cerca,
bajo la excusa de que los personajes sois tú,
tu familia, tus amigos,
enemigos, o compañeros de estudios o de trabajo.

Que el reparto o el guión y sus implicaciones
para tu vida no te satisfacen,
que son injustas,
o incluso puede que hasta te agraden.

Por favor, que es una película.

A mi no me la cuentes.

No me interesa el cine,
ni las locuras del pensamiento.

Ni tengo la culpa
de que tu confundas eso con tu vida.